Tu perfume besa

 

Tu perfume besa.

 

Y tus iris danzan y se te esfuman.

En tus dulces sueños de primavera.

Con leyendas gratas de jardinera.

Y silencios hondos que me perfuman.

 

Y dibujas gozos profetizados.

Con acorde alegre de tu sonrisa.

Con los cantos suaves que van de prisa.

Con tu gracia y pasos que van cansados.

 

Y me llevas lejos con tu reflejo.

Y en pequeños brillos voy apresado.

Y en tus ojos vivo enamorado.

De tu casta gracia que va en tu espejo.

 

Y te alejas grácil y sois novicia.

Que en el pecho lleva atardeceres.

Que en tus voces danzan ya los quereres.

Y te afirmas fuerte a mi caricia.

 

Tu perfume besa mi limonero.

Y tus manos tocan lo que presiento.

Y tus ojos brindan un sentimiento.

Que se queda siempre en mi primero.

 

Robert Aníbal Sánchez Fajardo.

 

 

 

 

En el valle alegre.

 

 

En el valle alegre.

 

En el valle dulce va tu caricia.

Y en las garzas blancas vas dibujando.

El poema vivo que va flotando.

Con sonrisas mieles de tu delicia.

 

Y en remansos libres vos te reflejas.

Con el ritmo suave en cañaduzales.

Con el canto tierno de los raudales.

Con gemir sentido que va en tus quejas.

 

Y en tus ojos mieles de los paisajes.

Van palabras nuevas de los romances.

Van fragantes flores que vos alcances.

En el valle alegre de los parajes.

 

Y en suspiros fieles tu voz se queda.

Y en sublimes cumbres va tu armonía.

Y en perfume nuevo va tu alegría.

Y tus manos pintan ya la alameda.

 

Y en senderos libres te voy buscando.

Con tu néctar suave de tez trigueña.

Con el gesto amable de voz risueña.

Con tu esencia bella que vas pulsando.

 

Robert Aníbal Sánchez Fajardo.

 

 

 

Con aromas nuevos.

 

 

Con aromas nuevos.

 

En la azul penumbra yo te dibujo.

Con la esencia dulce de tu sonrisa.

Con tu encanto grácil que me divisa.

Con secreto aliento que me sedujo.

 

En corceles blancos vas cabalgando.

Los ensueños fieles que vas gimiendo.

Los paisajes nuevos que vas viviendo.

Y tus gozos gratos que vas amando.

 

Y en cascadas blancas vas reflejada.

Con aromas nuevos de las mesetas.

Con el vuelo alegre de los cometas.

En las noche fresca plenilunada.

 

Y en enjambres dulces de la floresta.

Vas dejando sueños profetizados.

Vas dejando gestos romantizados.

En el eco tierno que se te orquesta.

 

Tus sonrisas fluyen en limoneros.

Con el toque tierno de los ensueños.

Con el brillo casto de tus empeños.

Con el dulce canto de los senderos.

 

Robert Aníbal Sánchez Fajardo.