Poema
errante.
Tu
silueta ausente del escenario.
Y tu
mirada viva en el ambiente.
Tus
adioses dedos intermitentes.
Van
rondando y flotan en el espacio.
Tus
sencillas manos van diseñando.
Los
caminos nuevos en el retorno.
Y
azulado giro sea bondadoso.
Y
miradas junte en mar soñado.
Hoy tu
ausencia es canto de las esperas.
Es
paciente canto de los suspiros.
Es un
poema errante en tus gemidos.
Es constante
aroma que nos consuela.
Y tu
pecho ronda la primavera.
Esperando
broten ya los capullos.
De las
rosas nuevas de los arrullos.
De
miradas tiernas que nos esperan.
Robert
Aníbal Sánchez Fajardo.